Con más de quinientas composiciones y éxitos en las listas entre los años cuarenta y los ochenta, la texana era conocida por su habilidad única para confeccionar temas adecuados para cada artista. Así lo hizo para Ray Charles (You Don’t Know Me), Roy Orbison (Dream Baby) y, sobre todo, Bob Wills. Cuando se celebran años de su desaparición, recordamos su carrera.
La carrera de Cindy Walker, nacida el 20 de julio de 1918 en Mart (Texas)– despegó en Hollywood. Allí compuso para Bing Crosby (Lone Star Trail), participó en varios soundies (los precursores de los videoclips) y tuvo cierto éxito como cantante en 1944 con un tema ajeno, When My Blue Moon Turns To Gold Again.
Aunque poseía el carisma de una estrella, dejó de lado su faceta de intérprete para concentrarse en la composición. Entre los artistas que popularizaron sus canciones en esa época estaban Ernest Tubb (Warm Red Wine, 1949) y Gene Autry (Blue Canadian Rockies, 1952).
Pero, sobre todo, compuso más de cincuenta temas para el rey del western swing Bob Wills; entre ellos, Cherokee Maiden (1941), Dusty Skies (1941), Miss Molly (1942), You’re From Texas (1944) y Bubbles In My Beer (1948).
En los cincuenta volvió a Texas y escribió éxitos para Hank Snow (The Gold Rush Is Over, 1952) y Webb Pierce (I Don’t Care, 1955). En posteriores décadas, sus composiciones fueron interpretadas por Merle Haggard, Waylon Jennings, Jerry Lee Lewis, Elvis Presley, Emmylou Harris, Van Morrison y k.d. lang. En 1964 grabó un álbum con sus mayores hits, Words & Music By Cindy Walker.
Durante los noventa, su débil salud frenó el ritmo de su trabajo. Murió el 23 de marzo de 2006, a los 87 años.
“Componer es todo lo que siempre he amado. Aún hoy soy incapaz de cocinar”, declaraba Cindy en una entrevista. Por su obra prolífica e influyente, The Country Music Hall of Fame la consideró “la mejor compositora femenina del country”.
El homenaje de Willie Nelson
Maldita casualidad: pocos días después de la publicación de You Don’t Know Me: The Song Of Cindy Walker, la compositora texana falleció.
Ante todo, el disco de Willie Nelson era un tributo a las grandes canciones de Cindy, interpretadas en su momento por artistas como Merle Haggard, George Jones, Ray Charles, Ernest Tubb y Elvis Presley, pero, sobre todo, por Bob Wills & The Texas Playboys, por lo que de rebote era también un homenaje al rey del western swing.
Nelson volvía al country puro y duro con un sonido clásico, gracias a la producción del veterano Fred Foster y a músicos como Johnny Gimble al violín, Buddy Emmons a la steel guitar y The Jordanaires a los coros.
Con su inconfundible voz, y entre el western swing y los valses two step, Willie reconstruía cánticos de bar como Bubbles In My Beer y The Warm Red Wine, relatos de épica vaquera como Cherokee Maiden y Dusty Skies, y grandes baladas de tintes jazzístico como You Don’t Know Me y I Was Just Walking Out The Door.