El proyecto se empezó a gestar hace más de una década, y desde entonces ha sufrido diversos percances como un reflejo de la accidentada trayectoria del mítico cantante norteamericano. Heaven Stood Still. The Incarnations Of Willy DeVille (2022) por fin verá la luz el próximo noviembre, cuando se estrene en el Doc’n Roll Film Festival.
Es evidente que un personaje como Willy DeVille (1950-2009) merecía un documental. La carrera del último romántico del rock’n’roll tuvo tantas etapas, tantos altibajos y, por qué no decirlo, tantas injusticias que debían ser contadas. Y, curiosamente, esa vida precipitada e inconformista se ha visto reflejada en el proyecto.
Su director, Larry Locke, ha trabajado en la película durante más de una década: su itinerante rodaje –en varias ciudades europeas (Londres, París, Berlín, Ámsterdam…) y norteamericanas (Nueva York, Detroit, Stamford, Nueva Jersey, Vermont, Boston, Nueva Orleans, Los Ángeles, Santa Mónica, Santa Fe…)– se inició en 2013, pero empezó a gestarse antes.
Tras algunos problemas de distribución e intentos de participar en diversos certámenes norteamericanos y europeos, finalmente se estrenará el próximo 4 de noviembre en Londres en el marco de la novena edición del Doc’n Roll Film Festival, que se celebrará del 27 de octubre al 13 de noviembre en varias ciudades británicas.
Heaven Stood Still. The Incarnations Of Willy DeVille es un retrato de la vida y la obra del cantante y compositor estadounidense: desde sus inicios con Mink DeVille como una de las bandas habituales del CBGB neoyorquino en plena era del nacimiento del punk hasta su reconversión de defensor del rhythm’n’blues de Nueva Orleans, pasando por el éxito de su canción Storybook Love para el filme La princesa prometida (Rob Reiner, 1987), nominada a un Óscar.
El documental explica también su enorme popularidad en Europa, donde se erigió en la primera voz de la música de raíces americanas en el viejo continente durante más de tres décadas, y su capacidad para moverse en diversos estilos y para crear distintos personajes, con canciones que eran himnos para los desconsolados y los oprimidos.
Sin embargo, el filme de Locke intenta profundizar en el misterio de Willy DeVille: casi nadie sabe nada sobre él, de dónde vino o a quién amaba. Y, la pregunta más importante: ¿cómo pudo pasar desapercibido o estar “bajo el radar” durante treinta y cinco años?
Para resolver el enigma, Heaven Stood Still –que toma su título de la canción del álbum de Mink DeVille Le chat bleu (1979)– cuenta, por supuesto, con diversas entrevistas de archivo con el propio artista, un centenar de fotografías (muchas inéditas) e imágenes de actuaciones de todas sus épocas. La historia se articula a partir de las declaraciones de un montón de personajes.
De la era de Mink DeVille aparecen componentes del grupo como Louie X. Erlanger (guitarrista), Ritch Colbert (teclista) y Rubén Sigüenza (bajista); Jack Nitzsche (1937-2000), productor del debut Cabretta (1977) y de los posteriores Return To Magenta (1978) y Coup de grâce (1981); Maxime Schmitt, antiguo jefe de Capitol Records en Europa, y Hal Willner (1956-2020), productor habitual de Leon Redbone, Marianne Faithfull y Lou Reed, entre muchos otros, que recuerda sus días como asistente en la mezcla final de Le chat bleu.
De su reencarnación como Willy DeVille, encontramos a músicos de su banda como el desaparecido David J. Keyes (bajista), Seth Farber (pianista y acordeonista), Freddy Koella (guitarrista, mandolinista y violinista, y autor del score del documental) y Yadonna West (vocalista), además de otros que años atrás también militaron en las filas de Mink DeVille como Kenny Margolis (teclista y acordeonista), Shawn Murray (batería) y Boris Kinberg (percusionista).
De esa época desfilan productores como Carlo Ditta –Victory Mixture (1990)–, John Phillip Shenale –Backstreets Of Desire (1992), Loup Garou (1995), Crow Jane Alley (2004) y Pistola (2008), el último álbum que Willy grabó en estudio– y Philippe Le Bras, fundador del sello Sky Ranch Records, quien con Ditta ayudó a DeVille a relanzar su carrera con Victory Mixture.
A nivel más personal, la película incluye entrevistas con Nina DeVille, su tercera y última esposa, involucrada en este proyecto desde el primer momento; John Savona, amigo de la infancia en Stamford (Connecticut), su ciudad natal, y el realizador Diethard Küster, autor del documental Beautiful Loosers (1997) sobre Willy, Leonard Cohen y Marianne Faithfull y director del doble DVD en directo The Berlin Concerts 2002 (2002).
Igualmente aparece el testimonio de colegas amigos como Peter Wolf (excantante de The J. Geils Band), autor del tema The Night Comes Down (For Willy DeVille), incluido en su álbum Midnight Souvenirs (2010); Wayne Kramer (guitarrista de MC5), que evoca sus años como vecino de Willy a principios de los ochenta, y conocidos como el teclista y productor Al Kooper, Chris Frantz (batería de Talking Heads, asiduos del CBGB) y el cantante Marshall Crenshaw.
Una mención especial –de hecho, se resalta su nombre en el cartel– para el legendario Ben E. King (1938-2015), autor de Stand By Me, versionada por Willy por primera vez en Mink DeVille como single en 1982, aunque ya la interpretaba en directo antes. En su última etapa, también cantó otro tema popularizado por el soulman, Spanish Harlem, recogido en The Willy DeVille Acoustic Trio Live in Berlin (2002).
Igualmente destacable es la presencia de Crispin Cioe, saxofonista de la banda de Willy en gira, cofundador de The Uptown Horns (grupo de metales colaborador de The J. Geils Band) y coproductor del documental.
Y aún hay mas: la diseñadora de vestuario Trudy Jost; el fotógrafo Leland Bobbé; Sharyn Felder, hija del compositor Doc Pomus, que explica la tormentosa pero fructífera relación entre su padre y Willy; y los escritores Garth Cartwright –autor de More Miles Than Money. Journeys Through American Music (2009)–, el poeta y novelista Nick Flynn, y el periodista musical Thom Jurek, quien reconoce que, desde que escuchó Cabretta, se pasó más de cuarenta años siguiendo su carrera.
Ahora solo falta esperar que, tras su estreno en el Doc’n Roll Film Festival, Heaven Stood Still empiece a circular y podamos verla también en España, ya sea en cines, en alguna plataforma de streaming o en formato DVD/Blu-ray. Por lo pronto, lo que está claro es que, a día de hoy, incomprensiblemente no forma parte de la programación del festival barcelonés In-Edit.
De momento, aquí podéis ver el tráiler:
Ciudad Criolla 