
Como buen amante del cine de blaxploitation, el funk y el soul, es natural que Quentin Tarantino recurra al hip hop en sus bandas sonoras… pero también al rock’n’roll en sus múltiples estilos. Tercera parte del repaso a las obsesiones musicales del director.
1 Foxy Brown – (Holy Matrimony) Letter To The Firm
2 The RZA – Ode To Oren Ishii
3 Rick Ross – 100 Black Coffins
4 James Brown & 2Pac – Unchained (The Payback / Untouchable)
5 Simon & Garfunkel – Mrs. Robinson
6 Roy Head & The Traits – Treat Her Right
7 Dee Clark – Hey Little Girl
8 Paul Revere & The Raiders – Good Thing
9 Los Bravos – Bring A Little Lovin’
10 Tomoyasu Hotei – Battle Without Honor Or Humanity
11 Meiko Kaji – The Flower Of Carnage
12 Robert Rodriguez – Police Station Assault
13 Johnny Cash – A Satisfied Mind
14 Neu! – Super 16
15 Combustible Edison – Vertigogo (Opening Theme)
16 Esquivel – Sentimental Journey
17 Rose McGowan – Two Against The World
18 Zamfir – The Lonely Shepherd
19 Nick Perito – The Green Leaves Of Summer
20 The Film Studio Orchestra – One Silver Dollar (Un dollaro bucato)
21 Zarah Leander – Davon geht die welt nich unter
22 Lilian Harvey And Willy Fritsch – Ich wollt ich waer ein huhn
23 Steven Wright – Super Sounds
24 KHJ – Vagabond High School Reunion
25 Chuck Berry – You Never Can Tell
26 The Blasters – Dark Night
27 Willy DeVille – It’s So Easy
28 The Coasters – Down In Mexico
29 Charlie Feathers – That Certain Female
30 The White Stripes – Apple Blossom
HIP HOP. El primer apunte de rap aparece en Jackie Brown, con la canción (Holy Matrimony) Letter To The Firm de Foxy Brown, de su debut Ill Na Na (1986). Después, en la primera parte de Kill Bill, el componente de Wu-Tang Clan The RZA aporta su experiencia en cortes como Ode To Oren Ishii. El realizador norteamericano intervino de alguna forma en el debut como director de RZA, El hombre de los puños de hierro (2012), aportando la leyenda “Presentado por Quentin Tarantino” y ayudando en la banda sonora. Pero tal vez es en Django desencadenado donde más temas de rap encontramos, como 100 Black Coffins de Rick Ross (escrito exprofeso para el filme), y ese Unchained que fusiona el The Payback (1973) de James Brown y el Untouchable (2006) de 2Pac.

HITS. A pesar de que parezca que las canciones que Tarantino son desconocidas, la verdad es que muchas de ellas fueron éxitos en su momento en los USA. Por ejemplo, Hooked On A Feeling, número 1 en Estados Unidos, Holanda, Australia y Canadá a principios de los setenta; I Gotcha, número 1 en las listas de rhythm’n’blues y número 2 en las de pop en 1972; Jungle Boogie, número 2 en las listas de rhythm’n’blues en 1972, o Let’s Stay Together, número 1 en 1972. En Érase una vez en… Hollywood es, posiblemente, donde suenan más canciones con presencia en los charts: Mrs. Robinson de Simon & Garfunkel (número 1 en Estados Unidos en 1968), Treat Her Right de Roy Head & The Traits (número 2 en las listas de pop y rhythm’n’blues en 1965), Hey Little Girl de Dee Clark (número 2 en las listas de rhythm’n’blues en 1959), Good Thing de Paul Revere & The Raiders (número 4 en 1966) y… Bring A Little Lovin’ de Los Bravos (número 51 en Estados Unidos en 1968, pero un gran éxito en España).

JAPÓN. La banda sonora de Kill Bill supuso diversas innovaciones. De entrada, la utilización de scores de otras películas, una tradición muy habitual en el género de artes marciales. En este sentido, Tarantino recurrió a los filmes de yakuzas (Battle Without Honor Or Humanity de Tomoyasu Hotei). Pero también recuperó a la estrella japonesa de cine Meiko Kaji con The Flower Of Carnage de 1973 (en el Vol. 1) y Urami Bushi de 1972 (en el Vol. 2).
JOHN CARPENTER. Robert Rodriguez, director del segmento Planet Terror de Grindhouse y autor de su banda sonora, reconoce que se inspiró en los scores de John Carpenter para este trabajo y que durante el rodaje a menudo sonaba su música en el plató. Es algo que, sin duda, se nota en cortes como Police Station Assault.

JOHNNY CASH. El legendario Hombre de Negro es quizá uno de los mitos personales de Tarantino. Aparte de incluir sus canciones en Jackie Brown (Tennessee Stud) y Kill Bill Vol. 2 (A Satisfied Mind) –ambos producidos por Rick Rubin–, el director de cine escribió las notas interiores de un álbum de Johnny Cash titulado Murder (2000) que recopilaba canciones sobre ladrones y asesinos.
KNACK, THE. En Pulp Fiction, en la escena donde dos rednecks sodomizan a Marsellus, Tarantino quería utilizar el My Sharona de The Knack, pero en ese momento otra película –Bocados de realidad (Ben Stiller, 1994)– también quería los derechos. Finalmente, se la quedó esta última.
KRAUTROCK. Otra de las curiosidades de las bandas sonoras de Tarantino, que en este caso se concreta en Kill Bill Vol. 1 con Super 16 del grupo alemán Neu!, de su álbum Neu! 2 (1973).

LOUNGE. En el filme Four Rooms (1995), dirigido por cuatro realizadores (Allison Anders, Alexandre Rockwell, Robert Rodriguez y Tarantino, responsable del segmento The Man From Hollywood, y también productor ejecutivo de la banda sonora), el grupo Combustible Edison se encarga de un score de lounge que repasa los diferentes matices de este estilo (del swing a los ritmos exóticos). Aparte, se incluyen un par de temas de uno de los maestros del género, Esquivel: Harlem Nocturne (1960) y Sentimental Journey (1961). En Planet Terror la actriz Rose McGowan también se acerca al género con Two Against The World, escrita por Robert Rodriguez.
MADONNA. Aunque no suena ninguna de sus canciones, Madonna es la protagonista de un diálogo en Reservoir Dogs donde diferentes personajes analizan el significado del tema Like A Virgin como “una metáfora de las pollas grandes”.
MUZAK. La degeneración del lounge, el muzak, aparece en Kill Bill Vol. 1 con la versión de The Lonely Shepherd de James Last en manos de Zamfir (1974). Pero también en Malditos bastardos, con las adaptaciones para ascensores y consultas médicas de The Green Leaves Of Summer (Nick Perito), de la película El Álamo (John Wayne, 1960) y One Silver Dollar (Un dollaro bucato), de Un dólar agujereado (Giorgio Ferroni, 1965), a cargo de la japonesa The Film Studio Orchestra.

OLDIES ALEMANES. En Malditos bastardos no podían faltar temas en alemán de la época en la que transcurre la película, la Segunda Guerra Mundial: Davon geht die welt nich unter (1942) de Zarah Leander (máxima estrella del cine de la Alemania nazi) e Ich wollt ich waer ein huhn (1936) de Lilian Harvey And Willy Fritsch.
RADIO. En Reservoir Dogs tenemos a un locutor (un lacónico Steven Wright) que introduce cada canción dentro de un ficticio programa de radio llamado K-Billy’s Super Sounds Of The Seventies. Y en Érase una vez en… Hollywood se incluyen varias cuñas publicitarias de la mítica emisora de Los Ángeles KHJ.
ROCK’N’ROLL. Una de las escenas más recordadas de Pulp Fiction es la del baile de John Travolta y Uma Thurman con el clásico de Chuck Berry You Never Can Tell (1964), mientras que Abierto hasta el amanecer recupera a otros veteranos del género, The Blasters, con Dark Night (1985), y Death Proof se acuerda de Willy DeVille, con It’s So Easy (1980), y The Coasters, con Down In Mexico (1956). El precedente del rock’n’roll, el rockabilly, también tiene cabida en las dos partes de Kill Bill con el legendario Charlie Feathers –That Certain Female (1974) y Can’t Hardly Stand It (1956)–. Y la versión más actual de lo que entendemos por rock la encontramos en Los odiosos ocho con The White Stripes y Apple Blossom (2000).