Era al banjo de cinco cuerdas lo que Paganini fue al violín. Su estilo de tocar con el pulgar, el índice y el dedo medio, único y sincopado, conocido como Scruggs style picking, es el más utilizado por los intérpretes de bluegrass (desde Bela Fleck hasta Steve Martin, reconocidos discípulos). Recordamos su carrera cuando se cumplen años de su desaparición.
Muchos artistas indies que se atreven a tocar el banjo seguramente desconocen que Earl Scruggs fue un virtuoso revolucionario de este instrumento. Su máxima popularidad llegó cuando grabó con Lester Flatt The Ballad Of Jed Clampett, sintonía de la serie Los nuevos ricos (1962-1971), y cuando se incluyó su tema más conocido, Foggy Mountain Breakdown, en el filme Bonnie y Clyde (Arthur Penn, 1967).
Nacido en Carolina del Norte el 6 de enero de 1924, a Scruggs se le debe el mérito de convertir el banjo de cinco cuerdas en un instrumento solista: primero, como componente del grupo de Bill Monroe, The Blue Grass Boys, donde empezó a tocar en 1945 y participó en clásicos como Blue Moon Of Kentucky; y tres años después, con el guitarrista y mandolinista Lester Flatt, en Flatt & Scruggs And The Foggy Mountain Boys.
Con éxitos como Foggy Mountain Breakdown (compuesto por Earl) y tras devenir uno de los estandartes del revival folk de los sesenta gracias a su actuación en 1959 en el festival de Newport, en 1969 el dúo se separó: la espoleta fue el álbum Nashville Airplane (1968), donde Scruggs insistió en grabar versiones de Bob Dylan (entre ellas, Like A Rolling Stone y The Times They Are A-Changin’), algo que el tradicionalista Flatt no acabó de ver.
El progresismo de Scruggs quedó claro el 15 de noviembre de 1969, cuando interpretó Foggy Mountain Breakdown en Washington, D.C., en un acto para pedir el fin de la guerra de Vietnam, convirtiéndose en uno de los pocos artistas de country que apoyaba el movimiento antibelicista. Poco después, formó The Earl Scruggs Revue con sus hijos Randy (guitarra), Gary (bajo) y Steve (batería).
A lo largo de sus casi setenta años de carrera, siempre experimentó: en 1960 se dio cuenta de lo versátil que podía ser el banjo tras improvisar con el saxo King Curtis en televisión. Y a principios de los setenta amplió sus horizontes hacia el country-rock, colaborando con Dylan, The Byrds y Joan Baez, entre otros. En 1972 vio la luz I Saw The Light With Some Help From My Friends, con Linda Ronstadt y Nitty Gritty Dirt Band.
En 2001 publicó Earl Scruggs And Friends, su primera grabación en diecisiete años, respaldado por estrellas del pop, del rock, del country e incluso del cine. El resultado fue, a grandes rasgos, un disco de sonoridad bluegrass, en el que algunos de los invitados recuperaban temas de sus catálogos, mientras que otros aportaban nuevas composiciones; eso sí, siempre con el protagonismo del banjo todoterreno de Earl.
Las mejores colaboraciones correspondían a Dwight Yoakam (el tradicional Borrowed Love), John Fogerty (el saltarín Blue Ridge Mountain Blues), Marty Stuart (el medley de Foggy Mountain Rock / Foggy Mountain Special), Billy Bob Thornton (con una atractiva relectura de Ring Of Fire) y la all-star band del trepidante instrumental Foggy Mountain Breakdown, que incluía a sus hijos Randy y Gary, a Jerry Douglas, a Leon Russell y al actor Steve Martin (atención a su solo de banjo).
Menos afortunadas resultaban las aportaciones de Elton John (aunque su Country Comfort ganaba bastante con el revestimiento campestre), Melissa Etheridge y Sting (los primeros dos minutos y medio de su Fill Her Up eran excelentes, de lo más ortodoxo, pero luego se perdía entre sintetizadores y tics de su estilo).
En cambio, el resto de invitados procedentes del country sacaba mejor nota con el bluegrass más o menos contemporáneo: Travis Tritt, Vince Gill & Rosanne Cash y Don Henley & Johnny Cash.
El último disco de Scruggs fue el directo The Three Pickers (2003), con Doc Watson y Ricky Skaggs. En los 2000 colaboró en álbumes de Patty Loveless, The Charlie Daniels Band, The Chieftains y Dwight Yoakam, y su banjo apareció por última vez en The Crow. New Songs For The Five-String Banjo (2009) de Steve Martin. El 28 de marzo de 2012 falleció en un hospital de Nashville por causas naturales.